En la actualidad, vuelven a ser reconocidas las plantas medicinales por sus propiedades curativas y preventivas. La Medicina Natural pone a nuestra disposición distintos productos naturales que ayudan a combatir y/o prevenir las afecciones características del invierno.
Una amplia variedad de plantas y sustancias naturales actúan como estimulantes de las defensas del organismo. Especies como la Equinácea, el Tomillo, el Eucalipto, el Ajo, el Propóleo, la Jalea Real, el Polen, Ginseng siberiano, Shiitake, uña de gato, y también los probióticos, los cítricos y minerales como Zinc, Manganeo y Cobre.